La pandemia nos ha afectado a todos de manera generalizada. La covid-19 trajo a nuestras vidas una serie de cambios que han transformado nuestro día a día, tanto en el ámbito personal como en el profesional. Al analizar y enfrentar estos cambios, tenemos que reconocer que no todos estamos en la misma situación: el contexto en que vivimos determina, en buena medida, cómo podremos sobrellevarlos. 

Durante muchos años, las mujeres han luchado por cerrar las brechas de género que hay en la mayoría de los sectores. Ya sea en la educación, el trabajo o el hogar, la lucha por la igualdad ha sido constante. El progreso había sido bueno: un estudio del World Economic Forum reveló que la paridad de género global estaba al 68 %. Sin embargo, en 2020 hubo un retroceso de 0.5 %. Si esta tendencia continúa, tardaremos más de 100 años en cerrar la brecha. El estallido de la pandemia y el efecto que tuvo en la economía mundial pausó el progreso y afectó mucho más a las mujeres que a los hombres. Brechas que ya se habían cerrado volvieron a abrirse y aquellas que seguían presentes se profundizaron. 

En epidemias anteriores se ha visto que la desigualdad en tiempos de crisis amenaza la participación de las mujeres en la fuerza laboral y pone en riesgo su obtención de empleos formales y mejores salarios. Según un estudio del Banco Mundial, en América Latina y el Caribe, las mujeres eran 44 % más propensas a perder su trabajo durante la pandemia, ya que los sectores con mayor participación femenina fueron los más afectados. Desafortunadamente, no sólo se vieron afectadas en el ámbito laboral. Aún hay mucha disparidad en la distribución del trabajo doméstico, el cual aumentó con el confinamiento. También aumentaron los reportes de violencia doméstica y la deserción escolar de niñas y mujeres jóvenes. 

Las mujeres, pues, se vieron afectadas en muchos ámbitos de su vida: trabajo, labores domésticas, educación, salud mental y violencia. Las trabajadoras en el sector salud enfrentaron circunstancias particularmente duras. Tras analizar e investigar los diferentes ámbitos en que muchas mujeres resultaron perjudicadas, nació el proyecto Nueva Realidad, por TodasPodemos. El objetivo no es sólo dar a conocer la enorme cantidad de datos y estudios que hay sobre cómo la pandemia afectó a las mujeres de México y el mundo, sino crear conciencia acerca de la situación en la que nos encontramos. Además, queremos brindar soluciones, propuestas y recomendaciones para que las mujeres podamos cerrar estas brechas de género que se reabrieron o profundizaron a causa de la pandemia. Como se afirma en el estudio del Banco Mundial, entender las consecuencias de género que conlleva la covid-19 es indispensable para diseñar respuestas de política efectivas. 

Durante las siguientes semanas, se harán varias publicaciones para explicar cómo se han visto afectadas las mujeres en ámbitos específicos, por qué se vieron más perjudicadas que los hombres y cómo podríamos cambiar esta situación. Al mismo tiempo, te invitaremos a participar en una encuesta para entender cómo nos hemos visto afectadas. Al publicar los resultados de manera anónima, también nos daremos cuenta de cómo la pandemia ha afectado a las mujeres en México según su situación.