Hoy en día ya no está vigente la concepción de que la moda es binaria en cuestión de género. Es decir, ya es cosa del pasado pensar que la ropa es exclusivamente masculina y exclusivamente femenina. Y es que la moda evoluciona y refleja la ideología de la sociedad de ese momento. «De acuerdo con encuestas recientes al menos 56% de la generación millennial y 50% de los centennials consideran que las ideas binarias del género son anticuadas y obsoletas» afirma el sitio web de la revista Glamour. Es por eso que «la propuesta genderless (‘sin género’) es de suma importancia en la actualidad«.

¿Qué es la moda genderless?

Si bien hace unos años la moda era unisex, actualmente es genderless. Lo que trata de hacer es que cualquier persona -sin importar cuál sea su género o su identidad- la pueda llevar. Gracias a ella, hoy muchas personas se pueden vestir exactamente de la forma que quieran. ¿Hombres usando faldas? ¿Mujeres usando trajes sastre holgados? ¡TODO ES POSIBLE!

La clave está en vestirse de una manera que no se adhiere a las normas típicas de género. Las ventajas de ella es que permite vestirse con atuendos tradicionalmente masculinos o femeninos y que además pueden incluir ropa, accesorios, maquillaje y peinados.

¿Qué se necesita para hacer este cambio de manera global? «Podría empezarse por los retailers, que tradicionalmente separan las secciones de ‘dama’ y ‘caballero’ y quizás separar por estilo, ocasión de uso, categoría de prenda, etc», agrega Glamour. Asimismo, «otra área de oportunidad son los desfiles de moda, que ya han progresado un poco en cuanto a representación transgénero o no binaria«.

¿Quién decide lo que puede llevar cada persona? Ese es el principal argumento que impone la moda genderless, que una persona no debe ponerse una prenda porque sea para hombre o para mujer, sino porque le gusta y le sienta bien.