Tenemos que hablar de la cultura de las fiestas y la diversión para las mujeres. Todas hemos ido alguna vez a algún lugar en dónde las mujeres no pagan cover, recuerdo que en la adolescencia esto era increíble. Muchas de mis amigas incluso salían sin cartera porque ya sabíamos que si ligábamos era de ley que ellos nos invitaran los tragos. Crecimos con esta idea sin cuestionarnos el por qué de la obsesión de los antros con los shots gratis para tus amigas o el no cover para nosotras, hasta que entendí que cuando algo es gratis es porque el producto eres tú.
Y así ha sido durante muchos años, siempre que salimos a disfrutar con nuestras amigas, tenemos que soportar que alguien nos esté viendo desde el otro lado de la mesa, que nos acose o que nos quiera invitar un trago a cambio de que estemos con ellos, como si fuéramos moneda de cambio. Hasta hace unos años, estas prácticas estaban super normalizadas, porque se reforzaba la idea de que nosotras estábamos ahí para el disfrute del goce masculino, esperando ser elegidas o invitadas a bailar, es decir, entrábamos “gratis” a los antros porque éramos objetos de atracción para la recreación masculina.
Ahora que pienso esto me horrorizo y quisiera salvar a todas las niñas que están viviendo actualmente estas situaciones en los antros, porque la cultura de la fiesta y la relación con el alcohol no es igual para ellos que para nosotras. Nosotras nos debemos de cuidar de que nadie ponga ninguna sustancia en nuestras bebidas, que no regresemos a casa solas de noche, que nuestro “amigo” no abuse de nosotras solo porque trae unas copas encima. La recreación es muy distinta para nosotras, pareciera que siempre estamos amenazadas por la mirada masculina y que no podemos salir a divertirnos en santa paz sin que ellos nos acosen.
La verdad es que ahora disfruto salir con mis amigas en bola, sabernos dueñas de nuestro cuerpo, dinero y decisiones. Celebro que podamos pagar nuestros propios chupes y que nos cuidemos entre nosotras, si bien crecimos expuestas a toda esta violencia sistémica también podemos transformarla y volver a ser dueñas de nuestro goce y diversión, porque las chicas sólo queremos divertirnos, como dice la canción.
0 comentarios