La lucha feminista, aunque es un movimiento de mujeres para mujeres puesto que ellas son quienes han sido víctimas del patriarcado, también impacta en los hombres y éstos deben ser parte del movimiento puesto que su objetivo final es la igualdad de derechos y oportunidades para ambos géneros y evitar cualquier forma de discriminación sexista. 

Por eso, aunque los hombres no pueden ir a las marchas feministas del Día Internacional de la Mujer, ya que son las mujeres las que deben dar a conocer su voz, sigue habiendo muchas cosas que pueden hacer para apoyar este movimiento y velar por una sociedad más justa y segura. 



1. Difunde información de la agenda feminista → muchos hombres siguen teniendo un machismo interiorizado y quizá ni siquiera se dan cuenta de a qué grado pueden perpetuar en esta desigualdad. Por eso, aprovecha este día para difundir en tus redes e intercambiar con tus amigos información real sobre el feminismo, sobre sus objetivos y del contexto general de desventaja en el que se encuentran las mujeres. 
2. Escucha antes de criticar → es bueno que expresen su opinión con respecto al movimiento, pero no sin antes informarse o tratar de empatizar con lo que viven las mujeres día a día. Escucha las historias de las mujeres que luchan, sus argumentos, sus denuncias y asegúrate de comprender todo el contexto antes de hacer una crítica sin fundamento. 
3. Recomienda y promueve el desarrollo femenino → consume productos de empresas lideradas por mujeres, lee libros escritos por mujeres sobre feminismo, entérate de la agenda feminista en la política y vota por aquellxs que busquen mayor igualdad de oportunidades y derechos para hombres y mujeres.
4. Reflexiona sobre tus propios machismos → Dedica esta fecha a reflexionar de qué manera puedes haber cometido acciones machistas o justificado las de otros. 
5. Por otra parte, los hombres pueden apoyar a sus compañeras de trabajo organizando cajas de resistencia en sus empresas, donando su sueldo ese día para que se reparta igualitariamente entre todos los trabajadores, incluidas las empleadas que no vayan a trabajar. «Es otra forma de apoyar la huelga», explica Patricia Aranguren, «sobre todo a las compañeras en situación más precaria».

Es importante que el 8 de marzo los hombres asuman las tareas domésticas que habitualmente recaen sobre las mujeres de su entorno, así como el cuidado de niños, niñas y personas mayores, para facilitar lo máximo posible la participación de las mujeres en la huelga.